¿SUBRAYAR FUNCIONA PARA ESTUDIAR MEJOR? – Los 3 errores más comunes al subrayar apuntes

¿De verdad es útil subrayar? ¿Voy a aprender mejor y más rápido si subrayo mis apuntes, o es una pérdida de tiempo?

¿Qué dice la ciencia al respecto?

En el post de hoy voy a responder a estas preguntas, te diré qué puedes HACER PARA SACAR PROVECHO de verdad a SUBRAYAR apuntes y te contaré los 3 PRINCIPALES ERROES que cometen los estudiantes al subrayar y CÓMO PUEDES EVITARLOS.

¿Cómo subrayar apuntes y textos para estudiar?Aprende a subrayar apuntes bien.

Sin duda subrayar es una de las técnicas más populares entre estudiantes. Todos en algún momento de nuestras vidas hemos remarcado líneas y líneas de texto en nuestros libros o apuntes mientras estudiábamos. Pensando que sería útil y bueno para nuestro aprendizaje. 

Pero, ¿de verdad lo es? Alguna vez te preguntaste ¿si subrayar es realmente útil?

Veamos qué dice la ciencia sobre estudiar subrayando.

En realidad. Numerosos estudios e investigaciones sobre ello, terminaron concluyendo que la técnica del subrayado no es la más efectiva a la hora de estudiar: 

  • Fowler y Barker (1974)
  • Nits y Hogrebe (1987)
  • Bell y Limber (2009)
  • Dunlowsky, Rawson, Marsh, Nathan y Willingham, (2013)
  • Y un largo etc.

Pues, en sus experimentos, los alumnos que subrayaban sus textos no obtenían resultados mejores que aquéllos que no lo hacían o que aquéllos a los que ya les entregaban los textos previamente subrayados.

Si en lugar de subrayar un texto, lo rodeas con una línea o le dibujas florecitas en derredor, surtiría el mismo efecto. El resultado sobre el aprendizaje, sería exactamente el miso.  

Al fin y al cabo, el mero hecho de marcar información con un color no la va a hacer más memorable y en la mayoría de los casos, para muchos alumnos, es una pérdida tiempo.

Salvo que se haga bien. Y esto depende de algo, que ahora veremos.


Si en lugar de subrayar, rodeas el texto o le dibujas florecitas en derredor, surtiría el mismo efecto. El mero hecho de marcar información con un color, no la hace más memorable y, en la mayoría de los casos, para muchos alumnos, es una pérdida de tiempo.

Mérit

Entonces, ¿para qué sirve subrayar apuntes? ¿Tiene algún beneficio?

Sí, subrayar te puede resultar útil. Pero su utilidad no es aprender más, ni memorizar más rápido. Por lo menos, no directamente.

Si quieres que el subrayado reporte beneficios sobre tu estudio, tienes que saber que es una herramienta cuyas finalidades son:

  • Organizar o estructurar.
  • Seleccionar.
  • Destacar.

Es decir. Te va a permitir identificar la estructura de la información a simple vista.

Te va a permitir separar y diferenciar la información relevante y útil, de la que no lo es.

Y te va a permitir destacar estos datos sobre los demás. De manera que, no te volverás a detener con aquellos datos que no subrayaste.

Pero para que cumpla estas funciones correctamente tienes que subrayar bien y eso implica un detalle muy importante. Y este es, seleccionar la información correcta.

Al fin y al cabo, eres tú quien decide qué partes del texto vas a subrayar y cuáles no. Y eso que has subrayado, es sobre lo que seguirás estudiando de ahora en adelante.

Sí eliges mal la información en la que te vas a centrar, tus resultados van a ser malos.

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Sabido esto, vamos a hablar ahora, de los 3 errores que más a menudo cometen los estudiantes al subrayar sus apuntes y que hace que no les sirva de nada.

Los 3 errores más habituales que cometen los estudiantes al subrayar para estudiar.

Es posible que hayas caído en alguno de ellos y son los 3 errores que, de ahora en adelante, no volverás a cometer.

Error nº1. Subrayar al principio.

Subrayar nunca debe ser lo primero que hagas.

Muchos alumnos, cuando comienzan a estudiar una asignatura ,lo que hacen es, directamente: sentarse, comenzar a leer y subrayar el texto conforme leen.

Esto es un grave error. Pues ese alumno todavía no tiene una visión lo suficientemente amplia sobre la materia como para ponerse a marcar la información que considera importante.

Primero debes hacer un acercamiento a la materia. Una lectura por encima, sin detenerte demasiado, pero que te permita hacerte una idea general de la información y de cómo está estructurada.

Después ya puedes empezar a subrayar el texto, pero nunca antes.

Error nº2. Subrayarlo todo.

Si eres de las personas que terminan por marcar prácticamente todas las líneas de la hoja, significa que no eres capaz de discernir la información relevante de la que no lo es.

Seguramente eres de esos alumnos que les parece que todo es importante.

Así que, ¡deja de hacerlo! Porque no sirve para nada.

Recuerda que la finalidad de subrayar es discriminar. Seleccionar información para que destaque sobre otra. Si lo subrayas todo, no destaca nada.

O lo que es peor, destaca solamente la poca información irrelevante que no marcaste y que no necesitas recordar. Siendo así, resulta totalmente contraproducente, y más te valdría no haber subrayado nada.

Lo ideal es que, en una hoja, haya más texto sin subrayar que subrayado.

Entonces. ¿Qué subrayar y qué no?

Subraya las jerarquías.

Las materias siempre están estructuradas jerárquicamente, de lo más general a lo particular. Identifica estas jerarquías y establece un color para cada una.

Con el color elegido marca el título o encabezado de esa jerarquía.

Y, muy importante, Subraya las ideas principales.

Las ideas clave. Es decir, aquellas sin las cuales el texto perdería su sentido. De hecho, esta es una buena pregunta que te puedes plantear:

Si elimino esto, ¿el texto tiene sentido? – Si la respuesta es afirmativa, no lo subrayes.

Otra buena pregunta puede ser:

Si elimino esto ¿Influye radicalmente en el significado? – Si la respuesta es negativa, no lo subrayes.

En definitiva, se trata de quedarte con lo necesario y eliminar la paja.

Y puede que tengas que subrayar algunos datos secundarios en tus apuntes.

Es posible que, en la asignatura que estés estudiando, aparezcan otros datos que no son clave para el entendimiento de la materia, pero que, debido a las exigencias de tus profesores es necesario que memorices para tus exámenes, por ejemplo: fechas o nombres.

En este caso, si consideras esos datos importantes para ti y los quieres remarcar, puedes hacerlo, pero hazlo de forma en que no lo confundas con la información esencial.

Y relacionado con esto está el siguiente error.

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Error Nº3. No seguir un código de colores para subrayar apuntes y subrayarlo todo de un solo color.

También es en fallo muy habitual. El caso es que, si lo marcas todo del mismo color, no puedes distinguir de un vistazo el tipo de información de que se trata.

Lo cual te impide conseguir uno de los objetivos del subrayado, el de organizar y estructurar la información para la vista.

Si en cambio, usas diferentes colores, podrás identificar de qué tipo de información se trata de un vistazo.

Y, ¿cuáles son los mejores colores para subrayar apuntes?

No existe una selección de colores que se diga que, invariablemente son los mejores para subrayar la información que estudias.

Mi recomendación personal es que uses colores que no duelan a la vista, que no te quemen la retina. Es mejor optar por colores suaves y agradecidos con tus ojos. Lo suficientemente claros como par que el texto, que suele ser negro, destaque dentro de la línea de color, pero que no sea excesivamente claro para que se distinga del fondo.

Cómo código de color a seguir, te recomiendo que uses al menos 3 colores de remarcadores para subrayar bien:

  • Un color para cada jerarquía.
  • Un color para las ideas principales.
  • Un color para las ideas secundarias.

Ahora ya sabes cómo subrayar apuntes para estudiar y cómo no hacerlo. Recapitulando:

  • Antes de subrayar el texto obtén una idea general de la materia.
  • Marca las jerarquías para identificar la estructura principal.
  • Subraya las ideas principales, solo lo más importante, las ideas clave y datos imprescindibles.
  • Y usa diferentes colores para subrayar cada tipo de información.
    • Establece un color para cada jerarquía.
      • Título del tema, subtema, apartado, definición o concepto…
    • Establece también un color para la información clave.
    • Y por último, si también consideras necesario marcarlos, utiliza otros colores para los datos numéricos, las fechas, los nombres… etc.
      • En definitiva, usa tantos colores distintos como diferentes categorías de datos necesites memorizar.

Así es como podrás hacer que subrayar te resulte útil para moverte más rápido entre los textos, organizar la información, seleccionar y destacar la información importante, que, al final de cuentas, es la que necesitas aprender.

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